Psicología y prevención de comportamientos de riesgo. El caso de la tenencia y uso de armas de fuego

Resumen

Desde los años 20 existe una tradición española en la aplicación de los conocimientos psicológicos a la prevención de conductas de riesgo. De hecho, una de sus dimensiones, la selección de conductores profesionales, define el primer rol profesional de intervención psicológica legalmente  regulado en España. Desde la década de los años 30, sin ninguna interrupción y con independencia de los diferentes regímenes políticos, ha habido un modelo preventivo. Los protagonistas de la historia fueron,  primero, los psicotécnicos en centros públicos, y luego los psicólogos en centros privados, la selección ha sido el hilo conector de lo que ha dado en llamarse el “Modelo Español” de Evaluación Preventiva. Su desarrollo en los últimos años ha sido espectacular, y áreas tan diversas como la selección de conductores, la acreditación de la aptitud psicofísica necesaria para tener y usar armar de fuego y para prestar servicios de seguridad privada, la acreditación de la aptitud psicofísica para el personal de vuelo y pilotos, o de las requeridas para obtener o renovar las titulaciones para el gobierno de embarcaciones de recreo, e incluso se ha llegado, en algunas autonomías, hasta los reconocimientos deportivos o el de la regulación de la tenencia de animales potencialmente peligrosos. El desarrollo del modelo coincide en una gran parte con el boom de la Ciencia Psicológica. Se justifican las razones que avalan el modelo, las dimensiones del problema y su utilidad para detectar problemas de salud en la población general.